jueves, 12 de marzo de 2009

Jugársela a la última carta

Es la sensación que tengo hoy, que me presento al exámen práctico de conducir, el permiso B.

Es la sensación que invade mi ser, después de haber dado 7 prácticas en las que todo ha ido más que bien, me la juego a que me salga un "jack" y hacer 21. La vida esta llena de estas situaciones, a las cuales estoy más que acostumbrado. Sin ir más lejos, en IVAO las cosas funcionan así: Tú puedes volar o controlar todo lo que quieras, pero te la juegas a dos horas con un tipo que decidirá si eres apto o no para ostentar el rango que ambicionas.

El carnet de conducir, qué gran título. Todo el mundo lo desprecia, diciendo que es fácil, pero nadie le da la importancia que se merece: Nadie desea no tenerlo.

De todas maneras, me abruma el surrealismo que rodea al permiso B. Sí, has leído bien, abrumar y surrealismo. Es todo muy acartonado, para dar paso a una serie de acciones posteriores a la obtención del permiso, más propias de Leónidas y sus 300.

Dejando temas concretos, planteo a los lectores habituales la reflexión: ¿Es justo jugársela a una sola mano? ¿Es necesario seguir así, o por el contrario, una evaluación contínua de los conocimientos elevaría el nivel de la vida?

Estoy a punto de descubrir la última carta, no tengo más dinero, todo o nada.

miércoles, 4 de marzo de 2009

Savoir faire - Historia de una utopía

Nadie tiene un manual de cómo vivir. Partiendo de esa base todos tenemos que aprender a desarrollar las capacidades y actitudes vitales.
¿Cómo saber qué opción elegir si ambas parecen igual de ventajosas? ¿Por qué cambiar algo que no lo parece por algo que creemos que lo es?

Si alguien fuera capaz de editar un decálogo de las acciones a realizar a lo largo y ancho de una vida, se le consideraría un erudito, un mago, un entendido de la antropología. Un sabio.

El problema viene cuando ese manual se llena de excepciones, cuando se da lugar a diferentes interpretaciones, cuando lo que ahí se refleja, no dibuja la realidad tal cual es.

Un manual de cómo vivir. Quizás fuera como la historia de J.K. Rowling y sus múltiples rechazos de Harry Potter, o puede que se convirtiera en un super ventas desde el primer momento. ¿Quién no querría tener un libro así?

Lamentablemente, tenemos que vivir de nuestras experiencias, del saber de los que ya vuelven cuano uno va, de la historia, de las verdades, y sobretodo, de las mentiras de este caminar.